Historia


Orígenes del vehículo eléctrico

La historia del vehículo eléctrico empieza mucho antes de lo que nosotros pensamos. Pese a que ahora escuchamos hablar sobre el vehículo eléctrico como algo novedoso, lleva en el mundo desde finales del siglo XIX.



Durante la II Revolución Industrial, se desató una fiebre por la innovación y, entre muchos inventos, aparece la electricidad como algo dispuesto para el consumo. Con la electricidad aparece el motor eléctrico y con ello, y la cantidad de avances en las comunicaciones, surge el vehículo eléctrico.


La aplicación del motor eléctrico a la tracción de vehículos revolucionaría la vida en las grandes ciudades.


Robert Anderson con su prototipo
de carruaje eléctrico

Entre los primeros en pensar en la fusión del motor eléctrico y el transporte, nos encontramos con el escocés Robert Anderson que entre 1832 y 1839 diseña, desarrolla y fabrica el primer prototipo del vehículo eléctrico y con el americano Thomas Davenport, que en 1834 y casi ningún conocimiento más que el de ser herrero, construye el primer motor de corriente continua. Estos dos precursores inician una nueva etapa en la cual, simultáneamente, aparecen el tren eléctrico y el coche eléctrico.


El motor de corriente continua
de Thomas Davenport

El motor eléctrico en el tren permitió la existencia de los trenes sin vapor y ayudó a que muchas ciudades como Londres o Nueva York proliferaran con el uso del metro y tranvías.

El coche eléctrico se convirtió en el sueño de muchos ingenieros que en diferentes lugares del mundo, se pusieron a investigar las diferentes posibilidades para una nueva y tecnológica realidad, la competición entre los diferentes tipos de energías (vapor, electricidad y petróleo) en el transporte estuvo muy reñida.

La invención y mejora de baterías recargables entre 1859 y 1880 por parte de Gaston Planté y la invención de la dinamo por parte de Wener von Siemens, permitió la posibilidad de pensar en vehículos eléctricos ya que gracias a estos inventos se podía almacenar la electricidad y que el vehículo funcionara sin necesidad de estar conectado a la red eléctrica. En 1888 aparece en Alemania el primer coche eléctrico de cuatro ruedas, el Flocken Elektrowagen, inventado por Andreas Flocken. Tenía el diseño de una calesa, un motor de 0.7 kW, una batería de 100kg y alcanzaba los 15km/h.

Los Flocken en su Flocken Elektrowagen

Pese a que la autonomía del vehículo eléctrico era limitada, el primer vehículo que logró superar los 100km/h fue un vehículo eléctrico en 1899. El Jamais contente era un coche eléctrico de construcción belga con forma de torpedo. Distaba mucho del Flocken Elektrowagen, el ligero material que envolvía el coche era una aleación de aluminio, magnesio y tungsteno, que lograba envolver las baterías y ayudaba a alcanzar esa velocidad.

El Jamais Contente primer vehículo
que superó los 100 Km/h

En 1900 aparece el Lohner-Porsche el primer híbrido de la mano de Ferdinand Porsche. La estructura de este vehículo es mucho más próxima a la del coche que nosotros conocemos ahora y se distancia de la estructura de dos ruedas del carruaje.

El Lohner-Porsche fue el primer híbrido
de cuatro ruedas que empleaba electricidad y gas

La moda del vehículo eléctrico era palpable entre 1900 y 1914, los avances tecnológicos mejoraban estos coches y los hacían no solo más silenciosos que cualquier vehículo propulsado a vapor o gasolina, sino más prácticos y cómodos con una autonomía suficiente para los trayectos en ciudad y un precio razonable para la alta sociedad.
El coche eléctrico era el que más se vendía, se llegó a publicitar como el mejor coche para las mujeres, ya que su funcionamiento era muy sencillo y no implicaba complicados cambios de marchas, que en aquel momento eran todo un quebradero de cabeza para cualquiera.


Henry Ford con el Ford T

El vehículo eléctrico se convirtió en el medio de transporte ideal dentro de las ciudades ya que era perfecto para la realización de viajes cortos, además gracias a que la electricidad empezaba a formar parte de la realidad de la población, era más fácil cargar.

Consecuencia de ciertos inconvenientes como su alto coste y los avances tecnológicos de Henry Ford con el Ford T y la cadena de montaje, el coche eléctrico se vio relegado a un segundo plano, dejando vía libre al vehículo de propulsión interna y finalmente desaparece en 1935.


Actualidad

En 1970 aumenta el precio de la gasolina y se prevé que vaya en aumento los próximos años. Este aumento de precio provoca que los fabricantes de coches se planteen recuperar los coches eléctricos. Uno de los primeros coches eléctricos que aparecen es el CitiCar en 1974. Se trata de un vehículo de dos plazas con una estructura un poco rudimentaria que pronto coge fama en estados unidos, convirtiéndose en uno de los más vendidos en 1975.

CitiCar

1990 se convierte en un año de cambios en el mundo, tanto en EEUU como en España los movimientos ecologistas denuncian una ingente cantidad de polución en el aire. En EEUU se toman medidas de restricción y General Motors decide realizar un plan de alquiler de vehículos eléctricos. Aparecen diferentes modelos de coches eléctricos, como el EV1, y pasados tres años y consecuencia de un cambio de las medidas de restricción, decidieron destruir.


Modelo EV1 de General Motors

En 1997 reaparece el vehículo eléctrico. Toyota lanza el Toyota Prius, el vehículo eléctrico vuelve a lo grande. El alto precio de la gasolina y la enorme preocupación por el cambio climático resucita el coche eléctrico. En el primer año logran vender unas 18.000 unidades.


Toyota Prius del 2000

La concienciación medioambiental y la inestabilidad del precio del petróleo, ha iniciado una revolución dentro del sector del automóvil. Grandes empresas como BMW, Audi, Nissan, Renault, Volvo… empiezan a interesarse por el vehículo eléctrico y a sacar su gama de eléctricos. Resultado de esta reaparición del vehículo eléctrico surgen nuevas compañías de vehículos exclusivamente eléctricos como Tesla Motors o BYD.


Tesla Roadster del 2008

Actualmente en Europa ya están circulando un total de 500.000 vehículos eléctricos. Desde que en el año 2000 empezara la venta y distribución del Toyota Prius a lo largo y ancho del mundo, ha habido muchos cambios y mejoras en el vehículo eléctrico y eso ha propiciado un mayor interés en la mejora, producción y venta de vehículos eléctricos (coches, motos y bicicletas). Aunque poco a poco, el coche eléctrico en Europa ya lo podemos considerar una realidad.

European Alternative Fuels Observatory

En menos de diez años Europa ha tomado conciencia de la realidad en la que vivimos actualmente y de la necesidad de apostar por nuevos combustibles en el transporte. Aunque el porcentaje de vehículos eléctricos no es alto, sin duda, el cambio que hemos visto desde el 2010 hasta ahora es significativo.

En las principales capitales de Europa se han tomado medidas para fomentar los vehículos eléctricos. Estas medidas no tienen que por qué ser radicales, sino entrar en la lógica de que estamos abriendo un mercado nuevo y que hay que dar a conocer las ventajas del vehículo eléctrico y fomentar su uso y compra.

EV Volumes

Los tres últimos años han sido decisivos en la compra de vehículos eléctricos enchufables. Europa parece que ha logrado arrancar en este mercado. Parte de este aumento en la compra de vehículos eléctricos se debe a que los países europeos han decidido poner en marcha diferentes planes, con la intención de incentivar las ventas.

En países como Alemania, Francia, Holanda… se han dado cuenta de la importancia de dar un empujón a este vehículo y por ello en cada país han decidido abordar las ayudas desde diferentes puntos, bien abonando una cantidad de dinero a quienes compren vehículos eléctricos o bien reduciendo el precio de las tasas por coche.

A la cabeza en estos cambios, sin duda alguna, se encuentra Noruega donde han decidido apostar por un cambio y dejar que el coche eléctrico se convierta en el protagonista de la carretera. El país del norte está marcando el ritmo para el resto de los países europeos. Su radical cambio de modelo tiene mucho que ver con la capacidad de visión a largo plazo y de adaptación por parte de los norteños.

Noruega se ha convertido en el país de referencia a la hora de tomar nuevas medidas a favor de las energías renovables y concienciación en el cambio climático. Noruega ha visto una necesidad, hay que saber qué mundo le dejamos a nuestros jóvenes y de qué manera lo hacemos determinará su futuro.

¿Cómo se ha convertido Noruega en una referencia en el vehículo eléctrico siendo el mayor exportador de petróleo del mundo?

  • No pagan tasas (un 25% de IVA en Noruega)
  • No pagan el impuesto de matriculación
  • No pagan peajes
  • Aparcan gratuitamente en la ORA
  • Puntos de recarga completamente gratuitos
  • Circular por el carril bus

Estos seis puntos son claves a la hora de realizar un cambio tan radical como es establecer el vehículo eléctrico en la vida diaria. Facilitar la compra y uso del vehículo eléctrico es uno de los factores más importantes a tener en cuenta y en lo que otros países se fijan, si el método noruego funciona, ¿por qué no aplicarlo en nuestro país?

Tampoco hace falta irse a Noruega para ver este tipo de medidas. Nuestra vecina Andorra está adoptando medidas similares:

  • Ayuda económica a la compra
  • Instalación gratuita del punto de carga doméstico
  • Carga gratuita en la vía pública
  • Aparcamiento gratuito durante 2 horas en la vía pública
  • Circulación permitida por el carril BUS
  • Peaje del Túnel de Envalira gratuito
  • Exención de la tasa de tenencia de vehículos
  • Matrícula personalizada de 5 dígitos gratuita

Con estos ocho puntos, muy similares a los seis noruegos, Andorra ha logrado convertirse en el tercer país de Europa con un mayor número de vehículos eléctricos en 2016.




España

En contraste con Noruega y otros países europeos, España se encuentra en una situación muy diferente. Aunque sí que encontramos apoyo por parte del gobierno (Plan Movea), la mayoría de propietarios y asociaciones de vehículos eléctricos encuentran este plan efectivo, pero incompleto, incluso escaso de fondos.

Pese a esta opinión, las ventas de coches eléctricos en el año 2016 en España han aumentado un 51,5% y de los híbridos un 68%. Además este primer trimestre de 2017 apunta a que las ventas del coche eléctrico aumentarán a lo largo del año.

European Alternative Fuels Observatory

Aunque las ventas totales de coche eléctrico impliquen un aumento, no hay que dejar de comparar estas ventas con las de coches convencionales en España. El aumento no es tan grande y el coche eléctrico no representa más que un 2,6% del total de vehículos.

Sí que es verdad que la concienciación parece que poco a poco va penetrando en la sociedad y que el número de personas interesadas por este tipo de transporte aumenta. Sin embargo, si lo que estamos buscando en España es cambiar la calidad del aire, mejorarla y dejar de emitir gases a la atmósfera para 2020, necesitamos mejorar las ayudas a los vehículos eléctricos (coches, motos, autobuses…), ya que cuanto más accesible sea el vehículo eléctrico, antes lograremos ese objetivo.