Actualmente, gracias a la liberalización del mercado eléctrico, podemos encontrar (y contratar) multitud de tarifas de electricidad con distintas características. Y aunque cada vez tenemos más conocimientos al respecto, todavía son muchos los que preguntan si Alcanzia ofrece una tarifa plana de electricidad, qué son las tarifas fijas de luz o cómo pagar una cantidad estable en su factura de luz cada mes.
Aunque ambos términos pueden dar lugar a entender lo mismo, no lo son. Te explicamos ambos conceptos para que contrates lo que estabas buscando; esta es la diferencia entre tarifa fija y tarifa plana:
Tarifa plana: cuota fija
Una tarifa plana de electricidad es aquella por la que pagas una cuota fija al mes, establecida previamente en el contrato entre el cliente y la comercializadora.
Lo que significa que todos los meses, consumas la energía que consumas (kWh), vas a pagar el mismo precio por tu factura de luz. A final de año, cuando la distribuidora haya proporcionado todas las lecturas del contador del año y la comercializadora tenga constancia del consumo real de energía que has realizado, se regularizan las facturas. Es decir, si durante esos meses has pagado menos de lo que has consumido, tendrás que pagar la diferencia; si durante esos meses has pagado más de lo que has consumido, se te abonará la diferencia.
¿Cuál es la ventaja o desventaja de esta tarifa? La ventaja es que sabes de antemano lo que vas a pagar de luz para organizar los gastos del mes. La desventaja es que si has consumido mucha más energía de la que has pagado, tendrás que pagarlo de golpe a final de año (y no siempre viene bien al bolsillo).
Otra forma de tarifa plana es aquella en la que tienes establecido un máximo de energía a consumir mensualmente. Es decir, un número de kWh máximo establecido previamente en el contrato firmado entre el cliente y la comercializadora. En caso de que este máximo se sobrepase, se deberá abonar la penalización correspondiente.
Tarifa fija: precio fijo
Una tarifa fija de electricidad es aquella por la que pagas un precio fijo por cada kWh que se ha consumido, establecido previamente en el contrato entre el cliente y la comercializadora.
Esto significa que cada mes se multiplicará el consumo de energía realizado (el total de kWh consumidos durante el periodo de facturación) por el precio que hayas contratado, por ejemplo:
233 kWh x 0,131 € = 30,52 €
¿Cuál es la ventaja o desventaja de esta tarifa? La ventaja es que cada mes pagas únicamente por la energía que has consumido, ni más ni menos; a final de año nadie te reclamará nada. Y, además, al precio fijo que hayas contratado y que no varía.
Si tienes un consumo de energía estable, es decir, todos los meses del año haces el mismo uso de electricidad, la factura comprenderá siempre el mismo rango; si tienes un consumo de energía desproporcionado, es decir, durante los meses de verano (o invierno) consumes mucha más electricidad, verás que tus facturas aumentan o disminuyen de unas a otras, pero siempre en función del consumo que hayas realizado.
Tarifas fijas de Alcanzia
Alcanzia ofrece tarifas fijas y tarifas indexadas al mercado eléctrico; con ambas opciones el cliente paga siempre por lo que ha consumido, ni más ni menos.
¿Qué tarifas fijas recomienda? Siempre depende de los hábitos de consumo del cliente.
Si concentras el consumo de electricidad durante la noche y primeras horas del día, será más rentable contratar una tarifa fija con dos periodos (P1 y P2) y dos precios (uno para cada periodo). Durante el P2, el precio de la energía es mucho más económico.
TARIFA FIX MAÑANAS (tarifa fija con discriminación horaria y dos precios fijos –para 2 periodos del día– por kWh).
Si en tu hogar se consume electricidad durante todas las horas del día, será más rentable contratar una tarifa fija con un único precio estable.
FIX 24 PLUS (tarifa fija con discriminación horaria y un único precio fijo por kWh).
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