Para iluminar tu hogar de forma correcta no basta con ir a comprar lámparas bonitas y poner una en cada espacio de la casa. Hay que considerar una serie de factores que son importantes a la hora de responder a nuestras necesidades. Y, sobre todo, tener en cuenta la factura de luz. Si tu espacio está bien iluminado, no necesitará tener demasiadas luces al mismo tiempo.
Estos son algunos puntos fundamentales que debes tener en cuenta a la hora de iluminar correctamente un espacio, ya sea tu vivienda, oficina o establecimiento:
1. Consumo
Es importante que tengas bombillas LED o de bajo consumo. En caso de que todavía tengas bombillas convencionales, fíjate en las próximas que compres. Esto supone un ahorro evidente en tu factura de luz.
2. Usabilidad
Debemos considerar el uso que se va a hacer de cada habitación para iluminarla de forma adecuada. Lo más recomendable es luz blanca para cocina y cuartos de baño, y luz cálida para el resto de estancias.
En los centros de trabajo u oficinas, es mejor contar con iluminación blanca en todas las estancias o despachos.
3. Capacidad
Dependiendo de lo grande que sea el espacio, podrá haber un número idóneo de luces. Debe haber un mínimo de un metro de distancia entre cada halógeno. No es necesario excederse de esta cantidad de puntos de luz ya que resulta innecesario y costoso.
4. Distancia
También es importante tener en cuenta el número de habitaciones de una vivienda o el número de espacios de un establecimiento. Debe instalarse un punto de luz cada 10 metros cuadrados. Las habitaciones que cuenten con 20 metros, o más, deben contar al menos con dos puntos de luz para iluminar de forma correcta la estancia.
5. Regulación
Es recomendable el uso de reguladores de potencia individuales para cada punto de luz, lo que evitará el uso excesivo de voltaje e iluminación. Además de ahorrar, controlas en cada momento del día la sensación que quieras transmitir.
6. Calidez
Para conseguir un ambiente cálido en tu hogar, también debemos fijarnos en el color. Cuando las paredes son de color oscuro, debemos repartir la luz con focos blancos o halógenos; mientras que cuando las paredes son muy claras, podríamos rebajar la intensidad lumínica en un único foco de luz cálida.
7. Fijación
Si se quiere dar protagonismo a algún elemento de decoración como: un cuadro, una escultura o un rincón, lo ideal es poner una luz dirigida o un aplique junto al objeto o lugar a destacar. Aunque son de menor tamaño, asegúrate de que estas bombillas también son de bajo consumo.
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